
Yo, Abner, #MeComprometo:
Ante la violencia de género contra las mujeres que se ha convertido en un fenómeno desgarrador que muestra un fuerte incremento, encontramos terribles cifras que evidencian la situación en la que se encuentran los Derechos Humanos de las Mujeres, si bien en la actualidad se han alcanzado avances en materia de atención a esta violencia, los esfuerzos han sido insuficientes, ejemplo de ello son los feminicidios que han golpeado fuertemente a las mujeres de nuestro país y de manera global.
Una cultura en la que se considera que las víctimas son “responsables” de los ataques violentos y en la que no existe sensibilidad para el manejo de los casos proporcionando un trato digno y respetuoso, tiene como resultado impunidad al momento de procurar justicia. Ante esto un grupo de hombres que de manera virtual y temporal conforman un colectivo, nos posicionamos en contra de la violencia hacia las mujeres, manifestando lo siguiente:
- La violencia feminicida, está sustentada por la violencia masculina. Nos encontramos en un momento histórico en el que los hombres observamos los avances que las mujeres están obteniendo, lo que nos enfrenta a interpretaciones desde nuestros parámetros masculinos basados en el desafío, confrontación y competencia; si bien de manera histórica las mujeres han sido colocadas en un segundo plano, es momento que nos sumemos al reconocimiento de sus derechos, especialmente a su libertad, a pesar de que esto lo interpretemos como una “amenaza” y nos ponga en dilemas profundos. Es importante realizar los ajustes a todas las ideas, expresiones, actitudes y conductas violentas que dirigimos hacia las mujeres quitando todo el sexismo y estereotipos que comúnmente utilizamos, partiendo de nuestra cotidianidad y permeando en todas las esferas en las que nos desarrollamos; evitando complicidades, confrontaciones e impunidad.
- Los principales responsables de esta violencia contra las mujeres, somos los hombres.
Los análisis de las masculinidades han abierto la posibilidad de observar formas alternas para construir, deconstruir y reconstruir las identidades que de manera histórica los hombres hemos ostentado; también nos han dado claridad en la existencia de tres áreas fundamentales de la Violencia Masculina:- contra las mujeres y otros grupos;
- contra otros hombres,
- y contra nosotros mismos. (S. Patricia Carmona Hernández, 2018).
También lee: Lo lamento tanto
Hay muchos hombres que fueron educados para pensar que “las mujeres pueden ser de su propiedad” y “que pueden disponer incluso de sus vidas”, sin ningún tipo de consecuencia, donde la omisión en la procuración de justicia refuerza estos aprendizajes y la impunidad a los crímenes por razones de género. En el caso de las mujeres que han sufrido y sufren violencia, es sabido que en su mayoría es a manos de hombres que se encuentran dentro de su grupo relacional (pareja, hijos, hermanos, padre, novio, etc.). La posibilidad de reflexionar sobre cómo llegamos a ser hombres, nos ayuda a entender que debemos actuar para detener esta lógica, sumándonos a acciones contundentes que tengan como resultado que paremos nuestra violencia y las de otros hombres, pero no con violencia o con enfrentamientos. Tenemos que ampliar la información y generar reflexión entre más hombres de una manera creativa y empática, con la intención de que más hombres se sumen, generando un colectivo sólido y real con el que hagamos frente a la violencia de género contra las mujeres de manera contundente, constante y proactiva.
- Los hombres necesitamos asumir compromisos que contribuyan a detener la violencia contra las mujeres.
Ampliar nuestra información acerca de la violencia ejercida contra las mujeres, es un tema central, dejando atrás las fuentes que no representan seriedad, como es el caso de la información que circula en redes sociales, especialmente aquella que menosprecia, violenta y exhibe a las mujeres. Es necesario que rompamos con la falsa creencia de saberlo todo, es necesario abrirse a recibir y buscar información que implicará cambiar nuestra forma de pensar y de actuar. Es de suma importancia que nuestro compromiso se traduzca en que logremos visibilizar los tipos y modalidades de violencia, que dentro del marco de la ley se han identificado y hagamos lo necesario para contrarrestarla, además de trabajar y hacernos cargo de las consecuencias. Para el reconocimiento del ejercicio de nuestras violencias es recomendable que nos integremos a un proceso que favorezca la reflexión y empatía con otros hombres que comparten situaciones similares; los grupos reflexivos son un ejemplo de ello que en muchos puntos de la geografía de México, Latinoamérica y el mundo existen y muestran resultados positivos concretos. - Finalmente, es urgente la creación de un Movimiento de Hombres en contra de la Violencia, en el que se cuente con organización no solo para reflexionar y cambiar a título personal, sino que cada hombre que lo integre se convierta en promotor y agente de transformación para que otros hombres se acerquen a los cambios que este momento histórico nos demanda.
Da click en: Me da esperanza
La responsabilidad es de todas las personas, pero yo como hombre #MeComprometo.
Sirva este texto para invitarte como hombre a sumarte con tres acciones concretas que puedes realizar y aportar:
1. Circular el presente texto entre todos tus conocidos y amistades de manera virtual y física con la finalidad de que más hombres se sumen a esta iniciativa y llegue a todas las latitudes. Posicionando el (Hashtag) #MeComprometo.
2. Publicar en redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram) un video con tu posicionamiento personal usando #MeComprometo asumiendo públicamente un compromiso para atender las formas de violencia que hemos ejercido los hombres en contra de las mujeres.
3. Publicar en redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram) textos breves con tu posicionamiento personal usando #MeComprometo invitando a otros hombres a sumarse.
Por Masculinidades consientes y respetuosas los hombres NOS COMPROMETEMOS.
2 comentarios sobre “#MeComprometo”